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La música de la "más grande historia de amor que el mundo jamás conoció", reza el cintillo del compacto de la música del fime Romeo y Julieta, producción de Craig Armstrong, compositor y arreglista de grupos como Massive Attack, Madonna, U2, Passengers y Suede. El polémico director australiano Baz Luhrmann encargó el diseño y producción musical de la película al propio Armstrong y a Nelle Hooper, quienes reunieron a un surtido elenco de musicos alternativos para imprimirle el particular sello posmodernista a la banda sonora. Aunque el trabajo de ambos es coronado con hartos aciertos musicales, se ha convertido en la norma y la regla como lo comprobamos con la última producción de la dupla, dentro del CD de Mission Impossible y sus anteriores incursiones en filmes como Batman Forever y James Bond. Aunque a veces resulta inconsistente la mezcla de estilos de las diferentes bandas participantes en el track, los genios productores han dado con una eficaz receta que no solo permite hacerla sino que incluso promocionar y vender material de muy dudosa calidad. Así, junto al tema de amor de la película , interpretado con limpieza por Des'ree, encontramos el aporte de Butthole Surfers, "Whatever (I hade a dream)" -hiphop/funk narrado- y a Kym Mazelle, al borde del disco ordinario y elemental. Emprender el rescate y la reivindicación de lo underground es una tarea encomiable pero cuestionable si se prescinde de quienes, dentro de la órbita de la música subterránea, tienen los meritos y las cualidades. Repentinamente los productores echan en el mismo costal a éstos y a los insuficientes, tal y como en el género lo hacen dentro del diseño de la película, al borde de lo cult y lo kistch. Y a propósito de material semi de culto, nos encontramos los tres temas valiosos de la producción, "#1 Crush" de Garbage, "Loverfod" de The Cardigans y "Talk Show Host" de Radiohead, que denotan el impecable estilo post grunge. A Quindom Tarver, por su parte, se le encomienda la penosa tarea de hacer "Everybody's free (to feel good)", especie de himno gospel de iglesia protestante, parangón estético con la corte de santos de yeso, propiedad de Julieta (Claire Danes) en la película. Finalmente el tema "Little Star" de Stina Nordenstam, nos presenta una balada en folk con un tratamiento vocal de efectos, rescatable en el marco de la estructura temática del filme. El material del compacto por sí mismo carece de potencia y sus basamentos agógicos son extremadamente débiles, aunque dentro de la banda sonora cumple su cometido, cual es proporcionarle a la cinta de Luhrmann su estructura principal, como en un video-clip de enorme metraje.
COPYRIGHT 1997 Agencia Reforma
Byline: Angela Hoces Sauvat
Byline: Angela Hoces Sauvat
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